El próximo 20 de septiembre, la Banda Sinfónica Municipal de Sevilla, ofrecerá en el Palacio de la Algaba a las 20:30h un concierto homenaje a la figura del torero Juan Belmonte.
Presentado por Víctor García Rayo y con la participación de la soprano Mariló Román, el barítono Jorge de la Rosa, los clarines de la Maestranza, Romualdo Puelles Oliver y José Julio Vera Cuder, el concierto discurre de la manera que sigue:
En la
antigüedad todo comenzaba llevando los toros a la plaza, así nacieron los
encierros. Son por tanto los encierros algo "mu" serio. Sin embargo en “La Boda de Luis Alonso” ó “La noche del
encierro” de Gerónimo Giménez (Sevilla 1854 / Madrid 19-2-1923) un encierro provoca un
altercado durante la celebración de la boda de Luis Alonso. Mientras Luis
Alonso celebra su boda, por la calle corren los mozos delante de las reses
bravas. Alguien deja la puerta abierta y uno de los bureles se cuela en la casa
donde se celebra la boda. El novio es el que más corre. La novia ha de ser
defendida por los invitados...
En la capilla
de la plaza, a solas con la Madre de Dios, el hombre reza, y pide se derrame la
Gracia de Dios que lo libre de la muerte. Mientras tanto, fuera luce un sol
radiante, testigo de la lucha entre la vida y la muerte. “La Gracia de Dios” es el título del pasodoble de Ramón Roig Torné (Lérida 1879 /
Cartagena 10-5-1907) que nació de un pique musical. Cuenta la leyenda que en
1878, con motivo de los fastos de la
boda en Sevilla de Alfonso XII y María de las Mercedes, López Juarranz
compuso el pasodoble la
Giralda. Juarránz mandó una copia de este pasodoble a Roig
con la siguiente dedicatoria: “Para Ramón Roig, con la completa seguridad de
que se dará perfecta cuenta de cómo se escribe un pasodoble”. A los ocho días
de recibir dicha dedicatoria Roig remitió a Juarranz su pasodoble “La Gracia de Dios” con la
siguiente dedicatoria: “A Eduardito López Juarránz, para que compruebe, al leer
la presente partitura de la
Gracia de Dios, que se trata de un verdadero pasodoble, desde
luego mejor que el suyo”.
Sevilla es la
capital del mundo del toro. Se abre la puerta del patio de cuadrillas y el
torero ve a Sevilla, la plaza
de toros más importante del mundo. “Sevilla”
de Isaac Manuel Franciso Albéniz y Pascual (Camprodón, Girona
29-5-1860 / Cambo-les-Bains “Bajos Pirineos”, Francia 18-5-909) forma parte del
primer cuaderno de “La suite Española” original para piano compuesta entre 1886
y 1889, y posteriormente instrumentada para orquesta y para banda por
diferentes compositores.
Suena la
música del paseíllo en la Maestranza de Sevilla para un imaginario mano a mano
de ensueño: Gallito y Belmonte. Para este sueño una realidad, la música que
suena en Sevilla cuando se abre la puerta del patio de cuadrillas, el pasodoble
“Plaza de la Maestranza” compuesto
por David Vela sobre letra de C.
González y J. M. Bormujos
Salen los
toreros y sus cuadrillas, pisan el albero… Suena “Los toreadores” de la ópera Carmen. Ópera en cuatro actos estrenada
en París en 1875, con música de G. Bizet
(París 25-10-1838/ Bougival, París 3-6-1875) y libreto de H. Meilhac y L.
Halévy basado en la novela homónima de Prosper Mérimée. Se narra una intriga
amorosa en la Sevilla
decimonónica cuyos protagonistas son un torero, una gitana cigarrera y un
militar.
Suenan los
auténticos clarines de la maestranza y sale el toro. Todo gira alrededor de un
animal poderoso, noble, altivo, valiente... Un anuncio de televisión hizo que
muchos asociemos una obra musical con la esencia de este animal. Esa obra es la
“Orgía”, tercer movimiento del poema
sinfónico “Danzas Fantásticas Op. 22” de Joaquín Turina Pérez
( Sevilla 9-12-1882 / Madrid 14-1-1949. La Orgía es en realidad, según Turina
una farruca de aires agitanados que “se sitúa en el humilde y modesto patio de
una casa de un barrio sevillano”: “El perfume de las flores se confundía con el
olor de la manzanilla, y del fondo de las estrechas copas, llenas de vino
incomparable como un incienso, se eleva la alegría”.
En los
tendidos y gradas los aficionados contemplan el duelo de toreros que compiten
en el tercio de quites. Rafael Taléns
Pelló (9-9-1933 Cullera-Valencia / 25-4-2012 Boadilla del Monte-Madrid)
dedicó el pasodoble torero “Tercio de
Quites” a D. Francisco Ibáñez, presidente de la Peña Taurina “Tercio
de Quites” de Cullera (Valencia).
Comienza la
faena, estética y valor ante el poder de la bestia. Comienza la danza de una
vida siempre breve. Muy famosa es la “Danza”
del Cuadro Primero del Acto Segundo
de la ópera “La Vida Breve” de Manuel de
Falla y Matheu (Cádiz 23-11-1876 / Altagracia, Córdoba, Argentina
14-11-1946) con libreto de Carlos
Fernández Shaw (también gaditano). En la ópera la tragedia acecha por males de
amores, en el ruedo la tragedia acecha por danzar con la muerte.
De
nuevo suenan los Clarines de la Maestranza. Hoy
en Sevilla torea Belmonte. Hoy se estrena el pasodoble “Recordando a Belmonte” firmado el 15 de
mayo de 2012 “en memoria del torero Juan Belmonte García, en el cincuentenario
de su muerte” por el compositor Cristóbal
López Gándara (Úbeda 1988)
La plaza está
llena de bellas mujeres que en los días de fiestas lucen mantillas. Entre ellas
está aquella que como Carmen, la famosa cigarrera sevillana la gitana indomable, sufre por su torero como
Carmen sufría por Escamillo. Por eso suena un canto al amor, la “Habanera” de la ópera
Carmen de Bizet.
Y
quien es él. Él es el torero, Belmonte, como también podría haberse llamado
Curro Romero, Gallito, Pepe Luis Vázquez, o el Cid… o quizás Escamillo. Canta
el torero, suena la “Canción del
toreador” de la ópera Carmen de Bizet.
Nada acaba
porque todo queda en nuestra memoria. Un pasodoble habla de las tardes de toros
en Sevilla. La plaza de toros de Sevilla, la que está en el Baratillo. Esa que
es torera y cofrade. Por eso suena “Tardes
del Baratillo” compuesto por Pedro Gámez
Laserna (Jodar – Jaén 18-3-1907 / Sevilla 25-12-1987) en colaboración con Julio
Contreras Perales (Palma del Río
18-10-1907 / Sevilla 22-11-1986).